Seleccionar página

Con la llegada del invierno debemos preparar nuestro sistema de riego para que no resulte dañado por las bajas temperaturas y evitar que pueda llegar a congelarse.

Normalmente los jardines no necesitan grandes aportes de agua durante esta estación, por eso se recomienda vaciar el agua de las instalaciones de riego, ya que podría congelarse o dañar válvulas y tuberías.

Consejos a tener en cuenta en invierno

Como hemos dicho, nuestras plantas reciben la suficiente cantidad de agua debido a las lluvias propias de la estación y el rocío por lo que deberemos cerrar la llave de la toma de agua de nuestro sistema de riego y vaciar la red de tuberías.

Programas de riego para invierno

Durante el invierno deberemos apagar el controlador. Algunos controladores tienen un sistema de lluvia que se encarga de apagar las señales de las válvulas. De esta forma no perderemos información (horas de inicio, funcionamiento de las válvulas…) Si nuestro sistema de riego no tiene este modo de “sistema de lluvia” deberemos desconectar el controlador y cuando tengamos que volver a usarlo reprogramaremos algunos ajustes.

Motores y bombas

Para regar tu jardín mediante un sistema de aspersores necesitamos dar presión al agua. Con las bombas y los motores se consigue generar el caudal y la fuerza necesarios para el riego. Pero en invierno es necesario dar un cuidado y mantenimiento especiales a estas partes en concreto para evitar que sufran bajo las heladas. Que se sitúen en espacios que no bajan de cero grados y que están secos es esencial, así como realizar una revisión antes de su puesta en marcha.

Mangueras

En invierno si no se usan lo mejor es que las almacenemos en un lugar seco y protegido de las altas temperaturas. Revisa que esté bien enrollada, sin dobleces que puedan provocar grietas y roturas durante este tiempo. Revisa las conexiones de todo el sistema y coloca teflón en las juntas para evitar fugas o que entre aire.

Filtros

Para regar necesitamos dos condicionantes, presión y agua limpia. Para ello os es necesario limpiar los filtros regularmente. Existen distintas opciones según el sistema de riego:

    1. Filtros de arena

Se utilizan para eliminar la materia orgánica suspendida en el agua haciéndola pasar por un tanque de arena. Una de las posiciones de estos filtros permite el lavado de la arena al ponerla en marcha. Es recomendable hacer un lavado cada vez que notemos que el agua empieza a salir turbia y por supuesto, antes de volver a ponerla en marcha ante la llegada del verano.

    1. Filtros de malla y anillas

Se utilizan para interceptar todo tipo de partículas sólidas en suspensión. Periódicamente hay que desmontarlos para eliminar los sedimentos.

    1. Filtros Hidrociclones

Se utilizan para eliminar partículas en suspensión mediante la fuerza centrífuga. La suciedad se decanta en un depósito especial que ha de realizarse periódicamente, por lo menos una vez al mes.

Uniformidad del riego

Para lograr una buena uniformidad de riego en invierno, es necesario utilizar sensores de humedad para controlar la cantidad de agua que se aplica al suelo. Si los puedes guardar en un lugar seco durante estos meses aumentarás su durabilidad.

Válvulas

Son dispositivos mecánicos utilizados para controlar el flujo de agua en un sistema de riego por aspersión. Como hemos dicho, en invierno es conveniente cerrar o mantenerlas con un flujo de agua bajo, ya que nuestras plantas reciben la cantidad de agua suficiente.

En conclusión, deberemos tener varios aspectos a tener en cuenta. Ya que no es lo mismo vivir en una zona más seca, en la que no llueve mucho durante el invierno que en lugares más húmedos. Esperamos que estos consejos sobre el mantenimiento de riego por aspersión os hayan servido, no dudes en contactar con nosotros si tienes alguna duda.

¡Nos vemos en la próxima, hasta pronto!

Estamos conectados, consúltanos
Estamos conectados, consúltanos